4 formas de implementar el salario emocional para optimizar costos

Muchas veces, la entrega de los empleados por su trabajo disminuye notablemente; la rutina se vuelve un poderoso desmotivante, siendo el ambiente laboral uno de los espacios más afectados. Para la empresa, la desmotivación es un concepto que preocupa ya que la falta de interés laboral impacta de manera muy negativa en el desarrollo de cualquier empresa. Es por esta razón que se debe comprender la importancia de alentar al personal y empezar a buscar nuevas alternativas para encender de nuevo la llama.

Son muchas las empresas que piensan que la motivación va de la mano con la compensación monetaria. Sin embargo, para gran parte de los empleados, el dinero es solo el medio que ayuda a suplir necesidades y obligaciones. Es aquí donde entra en escena el salario emocional, ya que permite, de forma sencilla y poco costosa, motivar a los empleados.

Revisemos cuatro formas para hacerlo efectivamente:

1. Herramientas de aprendizaje

El personal posee habilidades y conocimientos que fueron influyentes a la hora de su contratación, saberes que hoy aportan a la empresa. Apoyar a los empleados para que se sigan formando académicamente (y a la vez como seres humanos) es el mejor y más potente motivador. Costear educación superior o realizar talleres dentro de las tareas laborales son algunas de las inversiones que realizan las empresas para mantener empleados capaces y felices.

2. Reconocer el talento en el equipo

Valorar los aportes y logros tiene un alto impacto en la actitud del personal. Reconocer los esfuerzos y las contribuciones de los miembros de tu equipo les dará un sentido de pertenencia único, ya que felicitarlos por su desempeño puede ser un gran respaldo del empleador que tendrá resultados muy positivos.

3. Adiós a la monotonía

Promover escenarios de esparcimiento bajará los niveles de estrés y colaborará a la sana convivencia entre los empleados. Un ejemplo son los bonos para restaurantes que promueven la integración y las charlas del grupo, dándoles un respiro de sus tareas cotidianas. Se incrementa el sentido de pertenencia hacia la empresa gracias a esos espacios.

4. Balance vida-trabajo

Se debe reconocer que los empleados tienen una vida más allá de la empresa, independientemente del cargo que ocupen, y cada persona velará por el bienestar de sus seres queridos. Es así como los jefes o supervisores deben mostrar interés en la vida de su equipo de trabajo, un gesto que se verá reflejado en el rendimiento laboral. Bonos para útiles escolares, tecnología o viajes, son algunos de los estímulos más utilizados.

Un equipo de trabajo motivado es la clave para que los objetivos de una empresa puedan cumplirse. Es así como los estímulos pueden marcar la diferencia entre lograr las metas o estancar el desarrollo. 

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